
El sabor de la innovación
Cuando Sara Grisales Olaya y sus primos terminaron sus estudios en el exterior y regresaron al Quindío dispuestos a hacer empresa, pensaron en su abuelo y en Grisalón, la panela que por décadas produjo, y que suspendió por dinámicas propias del mercado.
Fue un momento nostálgico, pero revelador. El trapiche del abuelo fue la inspiración y la innovación de una nueva generación de administradores de negocios. Fue la clave para crear, hace tres años, la empresa de panela orgánica pulverizada Mesabaja, presente en cadenas de supermercados en Colombia y Chile, y próximamente en Alemania.
Sara, de 28 años y quien ejerce con Sebastián, su primo, y Ricardo, su tío la cogerencia de la empresa, explica que Mesabaja produce y comercializa panela de trapiches en la región, pero con valor agregado: es un producto libre de insumos químicos, el reconocimiento de la marca se basa en conceptos de origen y tradición -presentes hasta en el empaque-, y una organización empresarial que funciona bajo los exigentes estándares del mercado global.
Así lo aprendió Sara en las universidades donde logró su doble titulación como administradora de negocios internacionales y administradora de empresas, en Boston y Sao Paulo, respectivamente. Es una profesional eficiente que ama el campo y sus orígenes, convencida de las virtudes del sector agroindustrial, pero respetuosa del medio ambiente, que ha llegado lejos, con los pies en la tierra.